Irán anunció ayer el diseño y la fabricación de una tercera generación de centrifugadoras de enriquecimiento de uranio, en lo que constituye un nuevo desafío a la comunidad internacional por parte del régimen de Teherán.

El presidente del país, Mahmud Ahmadineyad, inauguró ayer la fabricación de esta tercera generación de centrifugadoras, seis veces mas rápidas que la primera generación, y una maqueta de placas de combustible para el reactor de Teherán.

Ahmadineyad afirmó que en la tecnología nuclear su país ha llegado a un lugar donde ninguna potencia puede impedir su desarrollo.

El mandatario hizo esta declaración durante el acto de conmemoración del "Día nacional de la Energía Atómica" en la capital iraní.

"Tenemos previsto colocar en las instalaciones de Natanz (en el centro de Irán) 60.000 centrifugadoras, cuyo producto de un año serviría para abastecer a una central nuclear, pero con esta nueva generación podemos abastecer a seis centrales", dijo Ahmadineyad durante el acto, transmitido en directo por la televisión pública.

En su discurso felicitó a los iraníes y a todos los pueblos del mundo por este logro y dijo que se trata de un éxito no solo para Irán sino para todo el mundo.

Ahmadineyad añadió que, con el diseño de esta nueva generación de centrifugadoras, Irán ya no necesita construir nuevas instalaciones para el enriquecimiento de uranio aparte de las de Natanz.

Además, aseveró que quizás es el único país dotado con todas las fases de la tecnología nuclear, desde la explotación de piedra de uranio hasta la producción de la energía nuclear.

Por su parte, el Ministerio iraní de Asuntos Exteriores insistió ayer en el "derecho" de Teherán a desarrollar tecnología nuclear e instó a Estados Unidos a destruir todo su arsenal, en respuesta a las declaraciones e iniciativas adoptadas recientemente por el presidente norteamericano, Barack Obama, sobre la proliferación de armamento nuclear, según un comunicado difundido por la agencia de noticias Mehr.

"El pueblo iraní ha demostrado que su mayor prioridad es proteger sus derechos nucleares y no acepta ningún tipo de imposiciones", agregó, al tiempo que señaló que "EEUU tiene el mayor arsenal nuclear en el mundo y debe fijar una fecha limite para su destrucción total". Por último, apostilló: "La reciente doctrina nuclear del gobierno de Obama no es diferente a políticas anteriores, sino que es más perversa".