La violencia irrumpió ayer en la campaña electoral iraquí con los estallidos de dos coches bomba y de un cinturón de explosivos que llevaba un suicida, ocurridos en la ciudad de Baquba, que causaron al menos treinta muertos y 48 heridos, quince de ellos policías, según fuentes policiales.

El primer atentado se produjo cuando dos coches-bomba conducidos por suicidas estallaron de manera simultánea cerca de dos edificios administrativos de Baquba, capital de la provincia de Diyala, situada a unos 60 kilómetros al noreste de Bagdad.

La Policía iraquí informó de que un tercer coche bomba fue desactivado por expertos de las fuerzas de seguridad, que además prohibieron todo el tráfico rodado en la ciudad. Poco más tarde, un suicida detonó el cinturón de explosivos que llevaba adosado al cuerpo ante un grupo de policías a la entrada de un hospital público, que recibía a los heridos de las explosiones anteriores.

Ese tercer atentado iba dirigido contra el jefe de la Policía local, general Abdulhusein al Shemri, según la agencia independiente "Asuat al Iraq". Se trata de la serie de ataques más sangrienta desde que comenzó la campaña electoral en Irak el 12 de febrero.

Goteo de fallecidos

Por otro lado, en Bagdad, al menos dos civiles resultaron heridos ayer por el estallido de un artefacto en el barrio de Al Muasalat, en el oeste de la capital.

Además, un soldado iraquí perdió la vida y otros cuatro resultaron heridos por la detonación de una carga explosiva al paso de su patrulla en Al Tayi, 25 kilómetros al norte de Bagdad, dijo una fuente policial, citada por "Asuat al Iraq".

El goteo de muertos es constante en Irak desde hace años, aunque la cercanía de las elecciones, el próximo domingo, el odio sectario y la presencia de Al Qaeda hacen temer que se produzcan ataques que causen centenares de muertos, como ha ocurrido en el pasado.

De hecho, la Jefatura de Operaciones en Bagdad anunció ayer en un comunicado, recogido por la agencia de noticias independiente iraquí, el hallazgo de 27 proyectiles de mortero y de diez cargas explosivas en la zona de Al Maamel, en el norte de la capital.

Este anuncio lo hace después de que ayer, martes, revelara que en los últimos diez días las fuerzas de seguridad se incautaron de diez alijos de armas y explosivos en Bagdad que iban a ser usados por terroristas contra los comicios generales del próximo domingo.