Los habitantes del caserío La Galería, en la zona baja de Catalanes, en Anaga, aún no pueden acceder a este núcleo por carretera, ya que no se han solventado los problemas y desperfectos que las lluvias causaron el pasado día 1 de febrero.

A pesar de que durante dos semanas estuvo trabajando sobre el terreno una pala mecánica, los habitantes del lugar estiman que "no ha sido lo que necesitábamos, puesto que esos trabajos estaban destinados a acondicionar la vía de acceso hasta el caserío, pero a través de esa pista solamente pueden circular vehículos todoterreno, por lo que los coches de los vecinos aún siguen estacionados en nuestras casas".

Saturnina confiesa que después de tanto tiempo "aislados, la situación empieza a ser desesperante", pues entre otros inconvenientes por no contar con un acceso en condiciones "está el problema de que todo lo que necesitamos en nuestros domicilios lo debemos cargar a hombros desde la plaza de Catalanes".

Antonio señaló que "no hay manera de que nadie salga o entre, y es que en el pueblo no todos tenemos un todoterreno, y hay que cargar con la comida de la casa y la de los animales, haciendo una gran caminata, que debemos recorrer incluso con las bombonas".

Este vecino de La Galería explica que "han intentado abrir el paso y nada más, cuando al margen de los que vivimos aquí de manera permanente, también hay sumar a las muchas personas que acuden a atender sus terrenos los fines de semana".

Desde este caserío hasta la plaza de Catalanes hay un recorrido a pie de una media hora, que cada día realizan los cuatro menores que cursan sus estudios en centros educativos del Parque Rural, así como otros cuatro jóvenes que estudian en centros de La Laguna, para coger en este punto el transporte escolar o la guagua. En esta misma situación se ven las personas que deben trasladarse a sus puestos de trabajo, ya que sus coches no pueden subir por una pista que el último temporal partió en dos y que destrozó prácticamente en algunos tramos.

Los habitantes de esta zona, seriamente dañada por la borrasca, piden ahora que se les atienda "como se hizo con otros núcleos del Distrito Anaga, porque la situación empieza ya a ser desesperante, pues no vale la excusas de que solamente somos 25 personas y que hay zonas más pobladas a las que se está intentando dar una solución, porque de nosotros se han olvidado, puesto que llevamos un mes abandonados".