Más de 130 países acordaron ayer la Declaración de Nusa Dua sobre Medio Ambiente, que subraya la importancia de preservar la biodiversidad y la necesidad de adoptar una "economía verde" baja en carbono que frene el cambio climático.

El texto, pactado durante el Foro Ministerial Global sobre Medio Ambiente que se clausuró ayer en Indonesia, es el primero con rango de declaración dentro del marco de Naciones Unidas que aprueban los ministros del ramo en la última década.

"Poco después de (la conferencia de) Copenhague y de la gran frustración que generó, los ministros de Medio Ambiente de más de 130 países han vuelto a encontrar una voz colectiva. El mundo debería estar orgulloso de esto", aseguró el director ejecutivo del Programa de la ONU para el Medio Ambiente, Achim Steiner.

"Ésta era la primera prueba después de Copenhague y el sistema ha demostrado su capacidad de respuesta", añadió Steiner.

La Declaración de Nusa Dua aborda una amplia variedad de temas, que abarcan desde la conservación de la biodiversidad a la gestión de residuos electrónicos, pasando por la necesidad de adoptar una "economía verde" y de globalizar las políticas medioambientales.

Según Steiner, el documento aprobado servirá para proteger mejor la salud de las personas y el entorno natural de la basura electrónica y el tráfico ilegal de residuos tóxicos. Además, fomentará una "arquitectura de gobierno" global que busca facilitar una lucha más eficaz contra el cambio climático y los peligros que afronta el medio ambiente.

La declaración promueve la creación de un panel intergubernamental que acerque los avances científicos a la comunidad política, para que ésta pueda legislar en consecuencia y con rapidez.

El texto aboga por incorporar las cuestiones medioambientales a la agenda de prioridades del proceso de reconstrucción de Haiti, tras el devastador terremoto de enero que mató a más de 200.000 personas.

A pesar de no encontrarse entre los temas oficiales del Foro Ministerial Global sobre el Medio Ambiente, la lucha contra el cambio climático ha ocupado la mayoría de las conversaciones y reuniones informales que se han celebrado desde el lunes.

Esta reunión internacional, que ha congregado en la isla de Bali a ministros y delegados de más de 130 países, ha sido la primera desde la conferencia de la ONU sobre cambio climático de Copenhague, organizada en diciembre.

Precisamente, la reunión concluyó con un llamamiento general a relanzar las negociaciones con el fin de lograr un acuerdo en la cumbre de diciembre en México.

Más de cien países subrayaron en el Foro Ministerial Global sobre Medio Ambiente la necesidad de progresar de forma sustantiva durante los próximos meses para garantizar el éxito de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP-16), que acogerá Cancún (México).

"Todos hemos sentido la urgencia de realizar progresos sustantivos en las conversaciones sobre cambio climático", destacó el ministro de Asuntos Exteriores indonesio, Marty Natalegawa.