El Tribunal Supremo ha confirmado el archivo de la querella por prevaricación interpuesta el pasado mes de julio contra el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón por el ex vicepresidente de Telecinco Santiago Muñoz Machado, uno de los ocho procesados por el magistrado en el denominado "caso Telecinco" que resultaron absueltos en 2007.

El auto hecho público hoy rechaza el recurso de súplica interpuesto por Muñoz Machado contra el archivo de la querella que fue acordado por el alto tribunal a principios del pasado mes de noviembre, en coincidencia con el criterio de la Fiscalía.

El Supremo afirma que no ha lugar a revisar esta decisión porque la resolución que dictó en su día "contiene la fundamentación adecuada y necesaria para que la partes conozcan las razones de la inadmisión" y porque tampoco no se ha vulnerado el derecho fundamental del querellante a la tutela judicial efectiva.

En su resolución de noviembre de 2009, el Supremo concluyó que los argumentos de Muñoz Machado, que denunció que la actuación de Garzón durante la instrucción del "caso Telecinco"le supuso grave perjuicios, carece de relevancia penal para ser admitida.

En su querella, Muñoz señalaba que Garzón incurrió en "una desviación del poder jurisdiccional " al utilizar el procedimiento penal al servicio de intereses propios, diseñando un plan de actuación cuyos "efectos colaterales" le perjudicaron enormemente.

Así, por ejemplo,*acusaba a Garzón de iniciar el procedimiento "sin contar con lo más imprescindible, la concurrencia de hechos susceptibles de ser perseguidos criminalmente". Ante ello, el Supremo señaló que el juez de la Audiencia Nacional se limitó a actuar a instancias de una denuncia de la Fiscalía, que desde 1996 investigaba a las sociedades Gestevisión Telecinco y Publiespaña S.A. en relación con presuntos delitos societarios y contra la Hacienda Pública.

A esta denuncia se unió un informe de julio de 1997 realizado a instancias de Anticorrupción por los inspectores integrantes de la Unidad de Apoyo de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria y de la Intervención General del Estado. Además, la Sala de lo Penal, órgano jerárquicamente superior al juzgado de Garzón, avaló la competencia del magistrado para investigar los hechos, que había sido cuestionada por los imputados.

INVESTIGACIÓN JUSTIFICADA.

Sobre la implicación de Muñoz en el caso, el alto tribunal recuerda que la investigación que le realizó Garzón estuvo justificada por haber declarado el propio querellante que prestaba servicios profesionales de asesoría jurídica a Gestevisión Telecinco y que entre sus clientes se encontraba la ONCE, por lo que el ex vicepresidente de la cadena "no era ajeno a los hechos y operaciones" descritas en los escritos de calificación de las acusaciones pública y popular que sirvieron de cauce procesal para sentar en el banquillo a los procesados del "caso Telecinco".

En el caso Telecinco, en el que Garzón trató de investigar incluso al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, fueron procesados ocho responsables de esta cadena y de la ONCE, entre ellos el director general de esta última, Miguel Durán, y financieros como Javier de la Rosa. Finalmente, los procesados fueron absueltos tras el juicio que se celebró contra ellos en la Audiencia Nacional.