La contaminación no sólo afecta a la calidad de vida de los ciudadanos de países ricos, sino que es un factor clave en el empobrecimiento y la desigualdad social. Así lo denunció ayer el director de campañas de Greenpeace España, Mario Rodríguez Vargas, en la jornada de clausura del Foro Cajas de Ahorros y Tercer Sector que se celebra en Madrid organizado por la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), entre las que participa CajaCanarias.

Según las tesis de este experto, esta desigualdad se produce en un doble sentido. Por una parte, porque los lugares más degradados se encuentran en los países más pobres, aquellos que tienen una legislación poco estricta en materia medioambiental y que son elegidos por las empresas dedicadas a las industrias "sucias" para los procesos más contaminantes.

En segundo lugar, el mal uso de los recursos está directamente relacionado con los mayores niveles de pobreza y el desplazamiento de miles de seres humanos de sus hábitats. Como ejemplo de este hecho se refirió a la esquilmación de los bancos de pesca que se localizan en los países emisores de inmigrantes, que buscan en otros lugares las salidas económicas que no encuentran en sus países de origen.

Cambio climático

Por su parte, el director del Centro de Investigación Atmosférica de Izaña, Emilio Cuevas Agulló, se refirió a la necesidad que tienen los investigadores del ámbito climático de hacer llegar su mensaje a la sociedad a través de los medios de comunicación.

Cuevas Agulló dijo que esta necesidad está íntimamente ligada a la exigencia de la sociedad por conocer en qué se gastan sus impuestos, además de por la obligatoriedad de evitar que calen informaciones erróneas.

"Tenemos que difundir la información en un corto espacio de tiempo para evitar el ruido de los sectores interesados", entre los que situó a la industria energética de países como Estados Unidos.

En su intervención, el director de márketing de la Sociedad Española de Ornitología (SEO), Fernando Barrio Fuentenebro, explicó que su organización se dedica a la preservación de especies y hábitats y denunció que en España han desaparecido en los últimos años nueve de ellas, mientras que otras decenas se encuentran en riesgo de extinción.

Todo ello, dijo, se ha producido por varios factores como la destrucción de los entornos, la proliferación de grandes infraestructuras o la proliferación del uso de venenos.