"Ponme una garimba". Ésa suele ser una de las frases habituales que se usan para pedir un botellín de cerveza. Desde ahora, en La Palma se utilizará sólo para una marca concreta, la de la primera cerveza palmera. Se llamará así, "Garimba", y se empezará a distribuir antes de que finalice este año desde Los Llanos de Aridane y entre todos los bares y restaurantes de la Isla.

La cerveza palmera será elaborada por la entidad Cervecera Artesanal La Palma SL creada recientemente por seis socios, alemanes y nativos, para explotar un campo inexplorado en la Isla pero en crecimiento, según los datos que aportan en el estudio económico del proyecto. La industria se ha instalado en la calle Las Rosas de la ciudad llanense, en donde se concentran varias naves empresariales. Se están ultimando los detalles para ponerla en marcha y se prevé que en diciembre empiecen a distribuirse las primeras partidas de cerveza.

La entidad se encuentra a la espera de que se le otorgue la licencia de instalación y apertura que se solicitó al Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane, vinculada a un edificio de dos plantas con una superficie de 450 metros cuadrados. La actividad, recogida en la Ley 1/1998 de 8 de enero, de Régimen Jurídico de los Espectáculos Públicos y Actividades Clasificadas, se somete en estos momentos a un período de información pública por término de 20 días, a fin de que se realicen las observaciones que se estimen convenientes por parte de ciudadanos interesados.

Sólo para la Isla.- Según asegura su administrador, Thomas Bachmann, se trata de un proyecto innovador en la Isla, el primero de estas características que se desarrolla vinculado a la elaboración de cerveza, que extiende una pequeña producción local que existió en la ciudad llanense, en un establecimiento de restauración. La producción conservará su carácter artesanal, pero pasará a ser industrial, con capacidad para elaborar unos 250.000 litros de cerveza al año, que, por el momento, se distribuirán sólo en La Palma, porque la capacidad productiva es limitada para poder exportar.

La industria artesanal se dedicará a la elaboración de cerveza de malta, para lo que se requiere la importación de gran parte de la materia prima que se utilizará en su confección. La malta, principalmente, vendrá de fuera, pero algunos agricultores están en disposición de producir la cebada que requiere el producto, aunque la entidad se encuentra en negociaciones para poder definir este acuerdo en la Isla.

El toque final.- En la fábrica, además de la elaboración, se realizará el embotellado y el envasado de la cerveza de malta. Bachmann asegura que en principio se plantea la creación de un solo tipo de producto, aunque "este factor está por definir. Veremos cuál es el camino adecuado en función de la demanda y de las épocas. En el mundo de la cerveza se depende de muchos factores a la hora de decidir si el producto debe ser más ligero, más fuerte o más concentrado".

En cualquier caso, añadió el administrador, "queda claro que el componente artesanal es un valor añadido. Lo que pretendemos, antes de mediados de diciembre, es realizar una presentación inicial, una especie de inauguración, en la que invitaremos a los propietarios de los bares y restaurantes de la Isla, que nos servirán de catadores. Ellos definirán sus gustos y los que perciben de los consumidores. Y así concretaremos nosotros el toque final de la cerveza palmera".