El monte submarino Casablanca se encuentra a unos 480 kilómetros al oeste de la costa marroquí, en el borde este de la cadena de volcanes submarinos que formó las Islas Canarias y se cree que ha estado dormido durante los últimos 15 millones de años.

Así parece haber sido hasta que el National Geographic Centre de Southampton (Reino Unido) eligió esta elevación bajo la superficie del mar de unos 3.100 metros de altura para poner a punto su nuevo sistema de toma de muestras instalado en el robot submarino RRS Discovery.

Los técnicos esperaban analizar simplemente una colina cubierta de sedimentos, pero descubrieron con sorpresa picos afilados correspondientes a recientes erupciones volcánicas, informa la edición digital de ''The Times''.

"Esperábamos encontrar la montaña totalmente cubierta de sedimentos después de quince millones de años", explicó Bramley Murton, responsable científico de la expedición. "Sin embargo, encontramos montones de rocas descubiertas, corrientes de lava reciente descendiendo por sus laderas y montones de pequeños cráteres, evidencia de que se ha producido una erupción".

La vista constata que el volcán ha tenido actividad al menos en los últimos 10.000 años, que en los estándares geológicos corresponde a un momento reciente. Pero la mayor sorpresa se produjo cuando el robot profundizó unos cientos de metros más hacia el fondo marino. "Nos encontramos entonces sobre un gran campo de vainas --un pez alargado--, cada una de dos metros de largo, erguidas sobre sus colas", una reacción que parece respuesta a la aparición de un posible predador. Los investigadores no esperaban encontrar a tanta profundidad este tipo de criaturas.