El Centro de Recuperación Integral de Candelaria (CERI) lleva funcionando siete años con el objetivo de mejorar la calidad de vida de la población de mayores, mujeres, discapacitados y menores, ofreciendo para ellos diversas terapias. Casi 200 personas se benefician actualmente de los servicios, que son financiados íntegramente por el ayuntamiento.

Las prestaciones más demandadas son fisioterapia y la animación terapéutica, en la que se trabaja el alzheimer, lectoescritura, memoria y animación.

En el CERI trabajan actualmente una decena de profesionales: una logopeda, una psicóloga, una maestra, una animadora sociocultural, una fisioterapeuta, una auxiliar de clínica, una trabajadora social, una auxiliar administrativo y dos conductores.