Tenerife recibió esta semana la visita de la popular cantante Roser, que es de nuevo actualidad porque está a punto de sacar al mercado un nuevo trabajo, "Clandestino", después de tres años de silencio. Aunque su afición artística le viene de familia (es hija de actores con vocación musical), la catalana conquistó al gran público gracias a su participación en el concurso de Telecinco "Popstars". Ahora, tras una corta pero intensa carrera y tres producciones a sus espaldas, la solista barcelonesa ha decidido dar un giro a su carrera con su cuarto disco, en el que arriesga con nuevos sonidos y fusiones que abarcan estilos tan variados como el pop, R&B, swing, euro-pop, rock, hindi y el latino. En esta grabación, los fans de Roser encontrarán diez temas muy comerciales en los que la solista ha intentado reflejar su estado ánimo y sus vivencias a lo largo de los últimos tres años.
"Clandestino" supone un renacer en su trayectoria después de varios años sin grabar. ¿Cómo es la nueva Roser?
Sigo siendo una mujer de carácter y ahora he decidido replantearme mi carrera y volver a empezar cueste lo que cueste. En el camino he tenido que vencer muchos obstáculos y lo he pasado mal, pero esto no ha hecho sino que me crezca ante las adversidades. Siempre he dicho que lo importante no es cómo te caes, sino cómo te levantas luego y sales adelante.
Fue muy valiente al desvincularse de una multinacional como Warner.
Así es. Después de mi tercer disco sentí que no estaba haciendo lo que realmente quería. Creo que fue prematuro hacer un disco homenaje a Raffaela Carrá, para eso tenía que haber tenido más años de experiencia. No obstante, asumo la responsabilidad de haber aceptado el proyecto. Quizá en ese momento debí haber dicho que no, pero me hubieran echado de la compañía. Curiosamente fue más tarde cuando me vi valiente y tomé la decisión de romper mi contrato cuando aún quedaban varios años por delante. He de decir que la ruptura no fue traumática, sino consensuada. Mantengo una buena relación con ellos, simplemente sentía que no avanzaba y tenía la necesidad de hacer algo nuevo.
En el primer single de este disco, titulado "La bestia", saca su lado más salvaje. ¿Es este tema una declaración de intenciones?
Absolutamente. En los últimos años he vivido situaciones muy duras que me han hecho más fuerte. Para sobrevivir en este mundo tienes que sacar muchas veces tu lado más salvaje. Fue complicado en su momento replantearse un proyecto de vida no sólo en el apartado artístico sino en el personal. En este mundo te puedes encontrar muy solo y, a pesar de que seas conocida, te ponen muchas zancadillas en el camino. Supongo que "La bestia" fue mi manera de decir ¡basta! a lo que estaba ocurriendo, de seguir adelante manteniendo mis principios.
Javier Sardá protagoniza el videoclip de "La bestia". ¿Cómo lo convenció para participar?
Lo conocía y, además, vivimos cerca. Un buen día lo llamé para proponerle la idea y, para mi sorpresa, aceptó sobre la marcha. Javier es una persona que hace sólo lo que siente y cuando lo siente, por eso le agradezco tanto que haya querido colaborar conmigo. Está muy divertido en el vídeo. Hace el papel de malo; representa a todos esos personajes negativos con los que me he topado a lo largo de la última etapa de mi vida. El mensaje no va dirigido a nadie en concreto, sino a todas las personas que, bien sean de la industria musical o no, se regocijan con los fracasos de los demás.
¿El hecho de mostrarse siempre independiente y sin ataduras le ha hecho ganarse muchos enemigos?
En este mundillo es difícil mantenerse firme con unos valores. Yo me caso sólo con la gente que es coherente y no absorbente a la hora de trabajar. No acepto imposiciones. Abogo por dialogar las cosas y llegar a un entendimiento. El tiempo me ha enseñado que no todos los que están en una posición de poder saben de lo que hablan.
En "Clandestino" conviven su parte más salvaje y la más romántica. En su vida diaria ¿cuál predomina?
Es complicado. Soy una mujer de carácter, pero cuando llego a casa soy una mujer soñadora, sencilla y muy sensible. Creo que hay un cincuenta por ciento de cada una en mí.
Este cuarto disco ¿es el más comercial de su carrera?
Sí, y me encanta. Mucha gente tiene la idea de que un trabajo comercial no es bueno, pero no tiene por qué ser así. Si un álbum se ha hecho con cuidado, mimando hasta el mínimo detalle no hay que ponerle ningún pero. He currado mucho para sacar adelante este proyecto y puedo decir que es el mejor trabajo de cuantos he hecho. He contado con la ayuda de Raúl Násher, mi productor y de mi pareja, con la que he creado The Rojo Music.
El hecho de ser ahora empresaria le ha hecho cambiar actitud hacia las discográficas.
Lo que me ha dado es libertad para hacer las cosas a mi manera. Indudablemente, el esfuerzo es mucho mayor, pero creo que ha merecido la pena. Lo que normalmente en una compañía hacen treinta personas, nosotros lo hacemos entre cuatro. Estoy agotada después de un trabajo de tres años, pero también deseosa de compartir el disco con mis fans, que están deseando saber de mi.
¿Los seres humanos se han vuelto cada vez más agresivos?
Desde luego. La crisis no está siendo sólo económica, sino de valores. Creo que cada uno debería centrarse más en plantearse qué está haciendo mal antes de criticar y hacer daño a los demás. Las cosas irían mejor.
Además de cantante, es actriz y presentadora y ha trabajado como modelo. ¿En cuál de estas facetas se encuentra más cómoda?
Me encanta la música, pero me siento muy bien como presentadora. He conducido varios programas en Cataluña y ahora hay un proyecto para una cadena nacional que me hace mucha ilusión. Me encantan los espacios que me permiten improvisar.
¿Piensa venir a realizar algún concierto en Canarias?
Mi intención es volver en febrero, ya con el disco bajo el brazo y hacer una firma de discos y también alguna actuación. Así que ¡señores de los Carnavales, aquí estoy! Es una música muy apropiada para esas fechas porque es muy bailable y con la marcha que tienen aquí?