Nuestra primera página de hoy es sobradamente expresiva. Canarias es una nación porque ya lo era cuando fueron vilmente masacrados sus habitantes por los españoles de su país, señor Zapatero. Sobre todo por los castellanos y los mercenarios andaluces que los acompañaban. El pueblo guanche sufrió un homicidio a manos de los antepasados de quienes hoy se están riendo con usted en Las Palmas de Canaria. Por cierto, ¿a cuenta de qué fijó usted la celebración de ese Consejo de Ministros en Las Palmas? ¿Es que ignora, señor Zapatero, la diferencia de importancia que existe entre la tercera isla del Archipiélago y la primera? ¿Sería usted capaz de negar esta evidencia?

Remitimos al lector a nuestra primera página de hoy porque lo más importante que queremos transmitirle en este viernes empieza y termina precisamente en nuestra primera página de hoy. Como decimos, es una portada sumamente expresiva por su contenido y por la forma concisa en que hemos expuesto unas ideas bastante repetidas en los últimos meses. Canarias grita que quiere ser un país libre. Quiere ser una nación con bandera y asiento en la OU y otros foros internacionales. Y seguimos. Ha sido tal la sumisión de los canarios a la fuerza, que nos creemos españoles cuando no lo somos. Debido a esa falsa creencia aguantamos el escarnio del menosprecio con que nos tratan la nación española y sus habitantes, o al menos la condescendencia con que nos toleran. Admitimos que digan de nosotros que somos españoles, cuando los propios españoles saben que no somos españoles, sino canarios, personas atlánticas, habitantes de otro continente. A ver cómo se mastica esto.

Cuando alguien en la Península, en Baleares, en cualquier país de Europa, nos pregunta por qué somos españoles si vivimos a tanta distancia de las costas españolas, debemos aclararles que no somos españoles pero estamos sometidos a la tiranía de España porque a nuestros antepasados los conquistaron, los mataron vilmente y les robaron sus tierras. También debemos decir que en el presente España nos disfraza de comunidad autónoma para perpetuar su ignominiosa dominación. ¿Y de cuántas islas consta Canarias?, también nos preguntan. Pues de seis islas y varios islotes, entre los que hay uno grande que se llama "gran" Canaria sólo porque sus habitantes se consideran grandes, pues dicho islote en sí mismo carece de condiciones y atractivos que lo hagan merecedor de ese calificativo. Casi todo cuanto tiene de importancia procede de lo que las tropas de su país, señor Zapatero, han rapiñado en otras islas.

Emplazamos a cualquiera de Lanzarote, Fuerteventura, Tenerife, La Palma, La Gomera o El Hierro, y también del gran islote de Canaria, a que diga qué político o dirigente tinerfeño ha sido capaz de defender a Tenerife de las razzias canarionas. Damos premio a quien nos señale a uno, tan sólo uno, que haya levantado la voz a favor de esta saqueada isla. Sólo EL DÍA lo ha hecho y lo seguirá haciendo. ¿o es para echarse a llorar? ¿Para qué han acudido a las urnas los tinerfeños en las elecciones autonómicas, si los políticos que han elegido no tienen bemoles para enfrentarse ni a Canaria, ni al partido en el que militan?

Por cierto, ya que hablamos de votar, ¿votará doña Ana Oramas, la señora que dice que la hemos insultado por criticar su actitud política, a favor de los Presupuestos Generales del Estado? ¿Votará a favor de esquilmar a los españoles ricos, medianos y pobres?