El silbo gomero, al igual que el Tribunal de las Aguas de Valencia y el Consejo de Hombres Buenos de Murcia, ha sido incluido en la Lista Representativa del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial.

El Comité del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco, que se reunió en Abu Dhabi (Emiratos Árabes) y que tuvo que evaluar las 111 candidaturas presentadas, acordó ayer la inclusión en la lista del silbo gomero "porque se trata de un medio de comunicación casi único en el mundo, que ha subsistido gracias a su utilidad en un entorno que obligaba a cubrir largas distancias para cualquier actividad".

El citado organismo, ante el que defendió la candidatura del silbo gomero la directora general de Cooperación y Patrimonio del Gobierno de Canarias, Aránzazu Gutiérrez, considera que la pervivencia de este lenguaje silbado, conservado desde la época prehispánica, se ha hecho efectiva gracias a que se imparte en la educación tanto Primaria como Secundaria de la isla de La Gomera.

Según la viceconsejería de Cultura del Gobierno de Canarias, la inclusión del silbo gomero en esta lista "implica el compromiso del Estado de poner en marcha planes de salvaguardia específicos. Además, podrá beneficiarse de asistencia financiera procedente de un fondo creado a tal efecto".

El Gobierno de Canarias destaca en una nota el "valor excepcional como muestra del genio creador humano, dotado de una gran complejidad técnica y estética al tratarse de un sistema de comunicación para facilitar la supervivencia, así como su condición de expresión de la cultura popular de un territorio", dos de los pilares sobre los que se sustentó la candidatura aprobada ayer.

También se ha tenido en cuenta el valor del silbo gomero como producto cultural y como proceso a través del cual se define una cultura, "un lenguaje que reproduce otra lengua en convivencia con el idioma castellano, de forma no excluyente ni competitiva. Además, cobra fuerza la capacidad del silbo para ser transmitido de unas generaciones a otras, lo que le otorga notoriedad como patrimonio inmaterial de la comunidad".

Otro de los argumentos defendidos por la representante del Gobierno canario, Aránzazu Gutiérrez, en la reunión de la Unesco es que el silbo gomero es una parte viva de la actividad social de la comunidad gomera y su uso nunca "ha sido impuesto por una élite dominante, sino que deriva de las tradiciones y necesidades de un pueblo". Debido a esta circunstancia, la preservación de este peculiar lenguaje silbado se basa en la protección de los procesos que lo han hecho posible y "en el desarrollo de nuevas funciones que permitan la continuidad de su implantación en la sociedad actual".

Demanda social

Otro de los aspectos que han influido en la conservación y difusión de este testimonio cultural prehispánico han sido las medidas de revitalización del silbo gomero adoptadas por la Administración, en respuesta a la demanda social de los habitantes de la Isla Colombina.

La participación del Gobierno canario en su salvaguarda y revalorización está reflejada en medidas como la creación de organismos específicos dedicados a su cuidado, como el Comité Técnico del silbo gomero, y la elaboración de un marco jurídico adecuado: la Ley que regula la enseñanza del silbo en la Educación Primaria y Secundaria en La Gomera, única y ejemplar salvaguarda del patrimonio inmaterial.

El silbador y premio Canarias de Cultura Popular, el gomero Isidro Ortiz, ha considerado que "el reconocimiento del silbo de La Gomera como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco es un logro de todos los gomeros" y señala que a la isla "le faltaba este broche cultural para completar un importante recorrido en todos los ámbitos".

Ortiz señaló a Europa Press que "en La Gomera y en Canarias estamos todos de enhorabuena y debemos felicitarnos al poder contar con una Isla pequeña que en su territorio alberga dos Patrimonios de la Humanidad, uno el Parque Nacional de Garajonay y ahora el silbo de La Gomera".

El también monitor de silbo de La Gomera en los colegios públicos de su isla explicó que con la decisión de ayer en los Emiratos Árabes Unidos se valora, no sólo el silbo en sí mismo, sino la orografía insular por donde ha transcurrido este ancestro y también su belleza, su cultura y el esfuerzo de su gente durante siglos.

Isidro Ortiz cree que tras haber declarado al silbo gomero un Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, se ha dado un salto impresionante para su conocimiento en todo el mundo y también para su conservación.