Por sus cualidades vocales y por la semejanza en papeles y repertorio, el tenor lagunero Celso Albelo ha sido designado por la crítica como el sucesor natural de su compatriota Alfredo Kraus. Ascendente que los especialistas volvieron a recordar con motivo del último éxito cosechado por Albelo en el Festival de Ópera de La Coruña.

Horas después de participar en el homenaje que el festival gallego dedicó a Kraus, Albelo manifestaba a EL DÍA que el maestro de tenores "es un referente para mí".

Para el cantante tinerfeño, su predecesor es un ejemplo de "respeto al compositor, a la partitura y al público. Siempre dio lo mejor de sí a través de una búsqueda incansable de la perfección".

Por su forma de "traducir la música en expresión y sentimiento", reconoce en Kraus a "un cantante de gran honradez", que cultivo "un repertorio limitado y muy exacto de acuerdo a sus posibilidades canarios y de temperamento. Sin recurrir a artificios -agrega- encandiló al público y a la crítica a lo largo de su carrera".

"Como artista", señala, "es un modelo para las jóvenes generaciones de cantantes", ya que sus interpretaciones revelan "seriedad, dedicación y conocimiento preciso de su voz y de sus posibilidades la necesidad del permanente estudio. Ese respeto a la música y a la expresión son muy importantes para mí".

"El legado de Kraus está, hoy, más vivo que nunca", concluye Celso Albelo, quien sobre el escenario coruñés recordó al maestro cantando diversas arias de ópera junto a Borja Quiza.

Fraseo, voz, técnica

Como queriendo suscribir sus palabras, la crítica no ha escatimado elogios hacia Celso Albelo a su paso por Galicia, donde para muchos se ha confirmado como "el nuevo Kraus".

"Excelso Albelo". En estos términos se pronunciaba el diario el crítico de la edición digital de ABC a propósito de la interpretación ofrecida en La Coruña por el tenor tinerfeño Celso Albelo, protagonista junto a Desirée Rancatore de la nueva producción de "I puritani", de Vincenzo Bellini, con la que se abrió el la 52 edición del Festival de Ópera de la ciudad gallega. No es la única opinión favorable cosechada por el cantante lagunero, que con ocasión del estreno realizado en pasado día 20 también recibió los elogios de Julio Andrade Malde, recogidas en la página laopinioncoruña.es.

En ABC.es, J. J. Ponce escribe: "Si hubo un claro triunfador en la noche de apertura del LVII Festival de Ópera de La Coruña ese fue, sin duda, Celso Albelo, un joven tenor canario que vocalmente es un saltador de pértiga". Como ejemplo, Ponce pone la interpretación del aria "Credeasi misera". "Albelo llega, coloca la voz, sube hasta los agudos más increíbles (Fa) y, pasado el listón, sigue la andadura vocal como si nada -señala el crítico-. Buen fraseo, bella voz, buena proyección, técnica depurada, presencia escénica y dramaturgia creíble son los componentes que harán de esta voz un nombre a tener muy en cuenta en el futuro y que se disputarán las grandes mecas de la escena operística. La Coruña se rindió a su canto con atronadores aplausos y los bravissimo que surcaban la sala cada vez que interpretaba un aria".

En su tribuna, Andrade Malde reseña por su parte que "Puritanos abrió el LVII Festival de Amigos de la Ópera con lleno total y éxito memorable. El público interrumpió una y otra vez la representación con manifestaciones de entusiasmo (?) Aunque fue muy generoso con todos cuantos intervinieron en la función, hubo algo muy especial para Celso Albelo. El tenor hizo casi sus primeras armas en La Coruña y nuestro público lo conceptuó de inmediato como un tenor fuera de lo común por la calidad de su voz y por su impecable escuela. No en vano es discípulo de Bergonzi, otro grandísimo tenor a quien aplaudimos aquí a comienzos de su espectacular carrera en dos temporadas (1955 y 1956)".

Para Malde, Albelo "ha afrontado una partitura imposible ("inhumana" -dijo Kraus cuando la retiró de su repertorio-) y nos ha dejado admirados por su arte excepcional y por unas facultades asombrosas que le permiten llegar al Fa sobreagudo, además de alcanzar repetidas veces notas que se hallan por encima del Do4 que se considera un límite. Albelo va muy lejos. Esperemos que siga visitándonos aunque su brillante carrera le lleve a los primeros escenarios del mundo. Como su admirado Kraus".

Elogio de Leo Nucci

Andrade también elogia la actuación de otro tinerfeño, el cantante Alberto Feria (a su juicio "un verdadero bajo"), que encarnó a Gualterio en esta nueva producción impulsada por Amigos de la Ópera y la Ópera de Damstadt.

En el Palacio de la Ópera de La Coruña Celso Albelo (como Arturo) y Alberto Feria compartieron escenario con Fabio Capitanucci (Ricardo), Marco Vinco (Georgia) y la citada Desirée Rancatore (Elvira), todos bajo la batuta de Marcello Panni, quien dirigió a la Orquesta Joven de la Sinfónica de Galicia.

En su visita a La Coruña, el gran baritono italiano Leo Nucci declaró a la prensa que "Celso Albelo es en la actualidad el mejor tenor para el repertorio de Bel Canto".