Hace ya diez años que un grupo de tres jóvenes de la Isla Baja decidió crear una empresa capaz de convertir el medio ambiente de su comarca en una fuente de riqueza y empleo. Así nació El Cardón Educación Ambiental, Premio Tenerife Rural 2009 a la Iniciativa Empresarial Sostenible, una empresa pionera que en una década ha dado un ejemplo a seguir y ha acercado la naturaleza a miles de personas.

Valerio del Rosario Martín es el único de aquellos tres jóvenes pioneros que continúa al frente de El Cardón, aunque sus otros dos socios fundadores continúan colaborando con la empresa, "ya que existe una magnífica relación". Es el director de una pequeña empresa que da trabajo estable a una decena de personas, pero que en épocas de mucha actividad emplea a más de una veintena. La mitad de los empleos son para gente de la comarca, "aunque la especialización de nuestros proyectos nos obliga muchas veces a recurrir a personas de otras zonas de la Isla y del país", indica.

El Cardón nació de una iniciativa para formar guías del Parque Rural de Teno y a este paraje natural continúa íntimamente ligada. La carta de actividades y servicios de la entidad es muy variada e incluye campañas de educación ambiental, interpretación del patrimonio, elaboración de material didáctico, gestión de instalaciones, turismo activo, consultoría ambiental y organización de rutas de senderismo, espeleología, escalada, kayak de mar, bicicleta de montaña o parapente biplaza.

Desde hace seis años, El Cardón se encarga de la gestión del Albergue de Bolico, en Buenavista del Norte, una instalación del Cabildo de Tenerife donde trabajan guías de esta empresa buenavistera.

Valerio del Rosario considera que el gran éxito de El Cardón Educación Ambiental ha sido "convertir una vocación como es la defensa del patrimonio natural y cultural en una forma de vida". El director reconoce que él y sus trabajadores se ganan la vida haciendo lo que más les gusta.

Uno de los secretos del éxito de El Cardón ha sido la diversificación de actividades "con coherencia y calidad". Según Valerio del Rosario, "no se trata de tener 20 calderos al fuego a lo loco, sino de dirigirnos a públicos muy diversos adaptándonos a las circunstancias de cada momento". Un ejemplo de esta capacidad de adaptación fue el cambio que experimentó El Cardón cuando la huelga de profesores en la enseñanza pública prácticamente hizo desaparecer las actividades extraescolares y la empresa dirigió sus esfuerzos al turismo rural. "Cuando un sector flaquea nos dirigimos a otro", indica el director de la empresa.

Una de las últimas iniciativas de El Cardón Educación Ambiental es la línea de colaboración abierta con el Hotel Luz del Mar, en Los Silos, y el operador de viajes que lo gestiona, especializado en turismo activo y senderismo.

Del Rosario lo tiene claro: "El medio ambiente puede y debe ser un recurso económico y laboral. La apuesta por lo verde no puede ser sólo una moda, hay que tomarse en serio las posibilidades que ofrece la conservación de la naturaleza y, por eso, tenemos que cambiar nuestra relación diaria con el entorno. Hay que apostar por el medio ambiente". Y lo dice alguien que sabe que se puede vivir de la naturaleza sin destruirla.