La Guardia Civil de Las Palmas culminó el pasado día 8 de abril la llamada "Operación Jaira", bajo la tutela del Juzgado de Instrucción número 8 de Arrecife (Lanzarote), desmantelando una organización criminal que traficaba con cocaína procedente de la ciudad colombiana de Medellín, según informó ayer la Benemérita en un comunicado.

De esta manera, la droga era transportada en envíos postales que declaraban contener muestras de artesanía, en cuyo interior se encontraba la droga perfectamente camuflada e impregnada con sustancias que impedían ser detectada por los canes antidroga, tratándose de una innovadora técnica de introducción de cocaína en nuestro país que denota la alta especialización de la organización criminal.

El máximo dirigente de la organización, J.C.J.C., de 29 años, de nacionalidad colombiana y residente en Lanzarote, importaba directamente la droga desde Medellín, desde donde, mediante artesanas y especializadas técnicas de ocultación, remitían envíos postales hasta Lanzarote, donde operaba la organización.

Por su parte, las medidas de seguridad empleadas por el cerebro de la organización eran muy minuciosas, y para recibir los envíos usaba las identidades de personas sin antecedentes policiales que eran captadas al ser remuneradas con importantes cantidades económicas. Una vez que el paquete llegaba al destino procedían a su retirada, siempre bajo la supervisión y el control de personas pertenecientes a la organización. Así, tras la primera intervención policial se procedió a las detenciones de M.A.V.B., de 23 años, y J.J.F.V., de 31 años, ambos de nacionalidad colombiana, cuando trataban de retirar el envío en una Agencia de Aduanas en Lanzarote. El máximo dirigente fue sorprendido en el aeropuerto de Gran Canaria instantes antes de que tomara un vuelo con destino a Madrid, desde donde pretendía volar hasta la ciudad colombiana de Pereira. De esta manera, todos los detenidos ingresaron en prisión. Posteriormente, se produjo una cuarta detención, en este caso de una mujer, C.R.A, de 35 años.