La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación del Gobierno de Canarias anunció ayer, en una nota, tal y como adelantó EL DÍA el viernes pasado, que la titular de ese departamento, Pilar Merino, suscribirá mañana un documento en defensa del sector productor y exportador de tomate de España, que también firmarán en Almería los responsables del área de Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana y Cataluña.

El comunicado confirma que en el texto se insta a defender los intereses de este cultivo en la Unión Europea (UE), por lo que se le solicita que no se hagan ulteriores concesiones respecto al acuerdo actual con Marruecos. En este sentido, remarcan que en los últimos años, los agricultores españoles están esforzándose por escalonar de forma adecuada la producción, introduciendo nuevas variedades de tomate y nuevas técnicas de producción.

En los próximos años se apuesta por seguir en esta línea, intensificando el esfuerzo, de forma que se produzca una reconversión estructural del sector productor del tomate, para la adecuación de sus instalaciones a los actuales sistemas productivos que repercutirá en la mejora fitosanitaria del cultivo, en la reducción de los costes de producción y en la mejora de la calidad y de los rendimientos obtenidos.

Marruecos

Según se pone de manifiesto en el documento, en febrero de 2006 comenzó a negociarse la renovación del Acuerdo de Asociación, en el que Marruecos persigue, básicamente, un aumento del actual contingente y la eliminación del calendario y del precio de entrada.

A la vista de lo expuesto y dado que se encuentra próxima la culminación de las negociaciones del Acuerdo de Asociación de la UE con Marruecos", es necesario que las autoridades comunitarias implicadas en la negociación tengan en cuenta las demandas de los productores, con objeto de evitar mayores perjuicios al sector".

El Gobierno de Canarias, en esta línea, y "dada la preocupación" que despierta este cultivo, elaboró el año pasado la Estrategia del Tomate de Exportación de Canarias, batería de medidas englobadas en un documento que contó con la participación del subsector.

Esta herramienta propone una actuación coordinada para incrementar la productividad del cultivo, concentrar la oferta y los medios de comercialización, impulsar la promoción de la imagen del producto e incrementar el apoyo público al sector con el fin de equilibrar el déficit de competitividad que arrastra.